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¡Haga una copia de seguridad antes de empacar! ¿Cómo es esa mochila?

¿Sabías que la cantidad máxima de peso que un niño debe llevar en la espalda es sólo 15% de su peso corporal? Esto significa que un niño de setenta libras no debe llevar más de diez libras y media en su mochila. A menudo se requiere que los niños carguen demasiado mientras intentan sostener muchos libros, tabletas, instrumentos musicales y equipos deportivos en sus pequeños cuerpos. Desafortunadamente, a los niños más pequeños se les pide cada día que carguen más peso en sus mochilas. En la lucha contra la pandemia de COVID-19, la disminución del uso de casilleros ha aumentado la necesidad de cargar la mochila con materiales para todo un día. Este aumento de peso crea una mayor tensión en sus huesos y músculos inmaduros, lo que provoca una mala postura y una mayor tensión muscular. Si su postura sigue siendo mala, corren el riesgo de sufrir dolores de cuello, hombros y espalda durante toda su vida.

A medida que comienza el ajetreo y el bullicio de la escuela, eche un vistazo a lo que llevan los niños en su viaje. Las mochilas son bajas sobre los hombros, cuelgan hasta el nivel de las piernas y solo se utiliza una correa para el hombro. Todo esto es una colocación incorrecta de la mochila que provoca un aumento de tensión en el cuerpo. El tamaño y la ubicación correctos de una mochila pueden marcar una gran diferencia en la postura general. La mochila de su hijo no debe ser más grande que su espalda. Debe usarse con ambas correas y debe quedar dos pulgadas debajo de los hombros y dos pulgadas arriba de la cintura. Debe ajustarse firmemente a su espalda, lo que mantiene el peso más cerca del cuerpo y permite una postura correcta de pie.

La tensión en los músculos posturales de los niños pequeños puede provocar muchos problemas persistentes en el futuro. Los estudios han demostrado que una mala postura al estar de pie y sentado puede provocar una alteración del patrón de marcha o una debilidad de los músculos de la columna. El dolor de cuello, hombros y espalda puede deberse a estos problemas y, a menudo, persiste hasta que se corrige la causa del problema.

Si nota que su hijo tiene una postura encorvada o le dice que tiene dolor de cuello y hombros, su fisioterapeuta puede ayudarlo. Los fisioterapeutas están capacitados para evaluar la postura y la alineación del cuerpo para comprender qué músculos están débiles y de dónde proviene el dolor. Los fisioterapeutas tienen el conocimiento para prescribir ejercicios de fortalecimiento o estiramientos, así como masajes de tejidos blandos y terapia manual para abordar inquietudes individuales. Los fisioterapeutas pediátricos se especializan en la prevención temprana de la mala alineación de los huesos inmaduros de un niño para disminuir las consecuencias estructurales futuras. También brindan información sobre cómo hacer de la fisioterapia un lugar divertido para que su hijo aprenda cómo funciona su cuerpo y cómo hacerlo funcionar mejor. Comuníquese con una clínica pediátrica de Colorado in Motion cercana si tiene alguna pregunta o inquietud actual.

El dolor de cuello, hombros y espalda puede convertirse fácilmente en un problema recurrente y es mejor utilizar medidas preventivas en lugar de esperar a que surjan los problemas. Tómate un poco de tiempo para observar la postura de tu hijo, pesar el peso de su mochila y observar cómo la lleva puesta. Muchos de nosotros entendemos la lucha contra el dolor persistente de cuello y hombros. Es importante actuar tempranamente con nuestros hijos para intentar prevenir este tipo de dolores educándolos sobre una buena postura. Pequeños cambios de postura pueden marcar una gran diferencia y afectar la salud corporal en el futuro.

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